Cada
vez me parece más evidente que todo este montaje, en forma de crisis global es
una estrategia bien pensada para conseguir este estado de alarma o de sitio que
han establecido de manera progresiva. Y el mejor y más eficaz pretexto es usar
el miedo al contagio, conectando con esos miedos ancestrales a las pestes más
mortíferas, solo que en este caso, por todas las grietas se deja entrever que
es todo un puro invento.
Por
ello la palabra que mejor define la situación actual es la Desproporción esto es lo que corrobora mis (y la de muchos)
sospechas.
Vemos
un doble mensaje paradójico, de un
lado una enfermedad presuntamente vírica que cursa con síntomas leves como una gripe común y de otro unas medidas excepcionales, nunca vistas
hasta ahora a nivel mundial, que parecerían justificadas en un ambiente verdaderamente
peligroso, tóxico o nuclear que de verdad supusiera enfermedad grave y muerte.